El apalancamiento financiero, es una estrategia que implica usar una deuda para financiar una inversión. En el contexto de bienes raíces, esto significa usar préstamos hipotecarios u otras formas de financiamiento para adquirir propiedades en lugar de pagar con nuestro dinero. En cierto sentido, se puede ver como un instrumento para adquirir "deudas buenas".
Es importante saber que el uso desproporcionado del apalancamiento financiero puede aumentar el riesgo financiero al exponerte a una mayor volatilidad del mercado, presionar tu flujo de efectivo, aumentar el riesgo de incumplimiento y aumentar los costos financieros. Es fundamental utilizar el apalancamiento de manera prudente y limitada para evitar estos riesgos y proteger tu situación financiera a largo plazo.
En resumen, el apalancamiento financiero puede ser una herramienta valiosa para aprovechar las oportunidades de inversión en bienes raíces, siempre y cuando se utilice de manera responsable y se enfoque en adquirir activos que puedan generar ingresos pasivos a largo plazo.